En este artículo te explicaremos cómo tejer un punto bajo paso a paso y te daremos algunos consejos para mejorar tu técnica.
El punto bajo es uno de los puntos básicos del tejido a crochet. Es un punto sencillo y versátil que se puede usar para crear diferentes tipos de proyectos, desde mantas hasta amigurumis.
Para tejer un punto bajo necesitas tener una hebra de lana y un ganchillo adecuado al grosor de la lana. También es importante que sepas hacer un nudo corredizo y una cadeneta, que son los puntos iniciales para empezar cualquier labor a crochet.
Los pasos para tejer un punto bajo son los siguientes:
1. Haz una cadeneta del largo que quieras, según el proyecto que vayas a realizar. Recuerda dejar una hebra larga al principio para poder rematar el trabajo al final.
2. Inserta el ganchillo en la segunda cadeneta desde el ganchillo, es decir, salta la primera cadeneta.
3. Engancha la hebra con el ganchillo y sácala por el hueco de la cadeneta, quedando dos bucles en el ganchillo.
4. Engancha de nuevo la hebra con el ganchillo y pásala por los dos bucles que tienes en el ganchillo, quedando un solo bucle. Ya has hecho tu primer punto bajo.
5. Repite los pasos 2 a 4 en cada una de las cadenetas que siguen, hasta llegar al final de la hilera.
6. Para empezar una nueva hilera, haz una cadeneta al aire y gira el trabajo. Inserta el ganchillo en el primer punto bajo de la hilera anterior y repite los pasos 3 y 4. Continúa así hasta el final de la hilera.
¡Así de fácil es tejer un punto bajo a crochet!. Con este punto puedes crear superficies lisas y compactas, ideales para hacer prendas de abrigo o accesorios. También puedes combinarlo con otros puntos más altos o abiertos para crear diferentes texturas y diseños.
Esperamos que este artículo te haya sido útil y que te animes a practicar el punto bajo a crochet. Si tienes alguna duda o sugerencia, déjanos un comentario y estaremos encantados de ayudarte. ¡Hasta la próxima!